A lo largo de su larga historia, Nisyros ha sido un lugar con intensa espiritualidad y religiosidad. Prueba, los numerosos lugares de culto, como lo atestiguan los restos de templos, los innumerables templos de la época bizantina y postbizantina, las humildes iglesias que se encuentran esparcidas por su campiña.
Uno se sorprende, ante la variedad y belleza del sentimiento religioso que se expresó en nuestra isla a lo largo de los siglos con los numerosos monasterios, iglesias, ermitas y objetos de arte religioso sin igual (como iconos bizantinos, hagiografías, tallas en madera, tallas en madera, etc.), que componen un mosaico de rara belleza. Esta belleza se acentúa aún más con el paisaje natural de nuestra isla, lleno de alternancias y sorpresas.
El conocimiento de los monumentos religiosos y las memorias sagradas de Nisyros, pero también el sentimiento profundo que transmiten, está conectado con la búsqueda de una forma de vida diferente, basada en los auténticos valores tradicionales. Por eso los monumentos de este lugar no son meros elementos museísticos o transmisores inanimados de información. Al contrario, es una fuerte presencia en la tradición cultural de la isla, un depósito de alma, esperanza y renovación, y por ello hoy puede inspirar y dar un sentido diferente a la vida del visitante de la isla.